La reaparición en África del virus de Marburgo, una letal enfermedad infecciosa, ha disparado las alarmas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ha tenido que mantener una reunión de emergencia sobre el tema, y de países como España. El virus, sin tratamiento ni vacuna, ya ha sido detectado en Guinea Ecuatorial y Camerún.
Hasta el 2021, la tasa media de letalidad de la enfermedad llega hasta un 88%. Asimismo, se trata de un patógeno que facilita su transmisión a través de la captura, el comercio y el consumo de fauna silvestre.
Brotó a partir de una especie de murciélago a los seres humanos y el primer brote se detectó en Guinea Ecuatorial, donde se registraron hasta la fecha 25 casos sospechosos y 9 muertes.
Los expertos han acelerado la búsqueda de una vacuna. Actualmente hay una treintena de candidatas, pero ninguna ha prosperado hasta ahora.
La mayoría de los infectados por el virus de Marburgo son asintomáticos o presentan cuadros leves. Estos son los principales síntomas:
Los expertos asocian el Marburgo a la familia del virus del Ébola y a enfermedades como el dengue, la fiebre amarilla o la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo.
La enfermedad se identificó por primera vez en 1967 en la ciudad germana de Marburgo por especialistas que se infectaron cuando investigaban a monos traídos desde Uganda.
La transmisión entre personas ocurre por:
Por el momento, no se han autorizado tratamientos ni vacunas para luchar contra la EVM. Sin embargo, la terapia de apoyo mediante rehidratación oral o intravenosa y el tratamiento de determinados síntomas mejoran la supervivencia.
La OMS se encuentra evaluando otros medios para combatir la enfermedad.