El Departamento de Defensa de Estados Unidos detectó una pieza de fabricación china en los más de 800 cazas F-35 que ha recibido el país norteamericano en los últimos años, pese a que las leyes norteamericanas y la propia regulación del Pentágono lo prohíbe.
Washington ya anunció el miércoles la paralización de este programa a la espera de nuevas aclaraciones y, finalmente, confirmó que la pieza en cuestión -un imán en un aparato eléctrico de Honeywell International- se lleva utilizando desde el año 2003.
El programa, que contempla la entrega de hasta 3.300 aviones, está obligado ahora a solicitar un permiso específico frente a sanciones al Departamento de Defensa, según un portavoz, Russell Goemaere, citado por la agencia de noticias Bloomberg. “Espero que pueda resolverse pronto”, dijo.
Por ahora, los responsables de este plan no se plantean sustituir los imanes en los aviones que ya se han entregado y Lockheed Martin, la empresa que fabrica los F-35, ya ha confirmado que tiene un proveedor estadounidense para solventar las entregas pendientes.
El Pentágono dijo que Lockheed Martin ya encontró una fuente alternativa de la aleación para futuras entregas.
La empresa informó voluntariamente del incumplimiento, y se está llevando a cabo una revisión para determinar cómo ocurrió. El Pentágono no reveló cuántas entregas de aviones se han retrasado ahora ni cuántas tenían la aleación proveniente de China. La empresa tiene previsto entregar hasta 153 F-35 en 2022 y hasta ahora ha entregado 88.
El F-35 es uno de los aviones de combate más avanzados del mundo. Estados Unidos opera cientos de estos aviones, que se presentan en tres configuraciones: el F-35A, de despegue y aterrizaje convencional, que vuela la Fuerza Aérea; el F-35B, del Cuerpo de Marines, que puede aterrizar verticalmente; y el F-35C, configurado para operaciones en portaaviones.
“Estamos trabajando con nuestros socios y el Departamento de Defensa para garantizar el cumplimiento contractual dentro de la cadena de suministro. El imán no tiene visibilidad ni acceso a ninguna información sensible del programa. El F-35 sigue siendo seguro para el vuelo y estamos trabajando con el DOD para resolver el problema lo más rápido posible para reanudar las entregas”, dijo Lockheed Martin en un comunicado. La aleación se utiliza en un sistema fabricado por Honeywell para Lockheed Martin.